El STEIBI recuerda la importancia de proteger y ser empáticos con niños y personas con espectro autista, teniendo en cuenta que los ruidos fuertes y repentinos, como los producidos por la pirotecnia, pueden desembocar en crisis de llanto, irritabilidad, miedo y ansiedad.
LA CONSIGNA ES QUE TODOS DISFRUTEMOS PORQUE LA ALEGRIA DE LAS FIESTAS NO ES IGUAL PARA TODOS.
La pirotecnia podría afectar la estabilidad emocional de las personas con autismo, además de afectar a las mascotas y animales domésticos.
MENOS RUIDO
Los efectos aturdidores durante las explosiones que se generan, especialmente en las fiestas de fin de año, impactan en las personas con autismo ya que puede estar presente la hipersensibilidad acústica que forma parte, en mayor o en menor medida, del espectro autista.